
Por otra parte, ningún animal percibe el mundo tal cual es. Incluso el ser humano, tampoco puede conocer la realidad en su totalidad. Los sentidos en todas las especies son limitados y de esto no escapamos nosotros. Y también es evidente que cada especie percibe exactamente lo que necesita para su supervivencia.
Por ejemplo, un insecto como la abeja que depende del polen de las flores, no ve formas, pero si ve intensamente los colores. Un mamífero sólo necesita ver las formas para alimentarse y cazar. Un león no verá una cebra quieta delante de unos arbustos, porque su forma se le confunde con el fondo. Un cazador humano, en cambio, como ve los colores, la percibe con facilidad. El león no necesita percibir colores para su supervivencia.
Nosotros percibimos colores. Por tanto, éstos son importantes en nuestra existencia. De otra forma, solo veríamos en blanco y negro como la mayoría de los animales.
En otro aspecto, es importante en esta introducción, saber que el color objetivamente no existe. Es solamente una reconstrucción de nuestra mente.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar!